El pasado viernes 4 de abril, decenas de republicanos y antiimperialistas irlandeses organizaron una protesta, bloqueando la entrada de la embajada belga en Dublín, que silenciosamente actúa como oficina oficial de enlace de la OTAN en Irlanda.
La acción fue convocada por la AIA “Anti-Imperialist Action Ireland” para protestar contra la presencia no deseada de la OTAN en Irlanda, para destacar el papel central que desempeña la OTAN en la ocupación británica continuada de Irlanda y la ocupación militar estadounidense del aeropuerto de Shannon, y para expresar solidaridad con el pueblo palestino y su resistencia, encarnando claramente la interconexión de la lucha de liberación nacional en Irlanda y Palestina.
Mientras los cánticos de «No a la OTAN» llenaban Elgin Street y la gente se congregaba para ver el acto, las fuerzas policiales del Estado Libre (Garda Síochána o la policía irlandesa) comenzaron a llegar. Desde el primer momento, las fuerzas de Harris se mostraron abiertamente hostiles e intentaron escalar la verja para enfrentarse a los activistas republicanos, pero rompieron el sensor eléctrico de la verja del recinto de la OTAN antes de que pudieran hacerlo.
La policía irlandesa lanza un violento ataque contra manifestantes
Los Gardaí lanzaron un violento ataque contra los activistas republicanos, utilizando gas pimienta a corta distancia, violando sus propias normas, apuntando a los ojos de los manifestantes. A pesar de ser reprimidos, los republicanos siguieron agarrándose entre ellos, afirmando que estaban allí para resistirse a la presencia de la OTAN en Irlanda y que tenían todo el derecho a hacerlo.
A medida que llegaba más policía, la violencia se intensificaba; la policía atacó a los activistas en las escaleras, lo que provocó que un manifestante se rompiera el tobillo después de que un agente de policía le apretara deliberadamente la pierna.
Mientras tanto, comenzaron los ataques contra los republicanos en las afueras de la puerta. En escenas similares al ataque contra el movimiento “Madres contra el Genocidio” el pasado lunes, las mujeres fueron el blanco específico de los ataques, y una activista fue agredida sexualmente durante su detención cuando un matón de la policía la agarró deliberadamente por el pecho.
Mientras el Servicio Especial de la Inteligencia permanecía impotente, tomado por sorpresa por esta acción directa contra la OTAN en una de las zonas más vigiladas de la ciudad, 6 republicanos fueron detenidos en las escaleras, junto con otros dos compañeros que habían sido detenidos en la puerta, y llevados a tres comisarías distintas de la ciudad.
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La mayoría de los detenidos fueron acusados de allanamiento de morada, mientras que algunos se enfrentan a cargos adicionales de obstrucción del trabajo policial.
Se realizó una breve protesta frente a la comisaría de Irishtown en apoyo de los detenidos, antes de que la noticia de su comparecencia ante el tribunal el viernes por la noche provocara un llamamiento para que el público se reuniera de nuevo en Parkgate Street.
Durante la vigilia de solidaridad, los ocho activistas fueron conducidos uno por uno al banquillo de los acusados en el juzgado y puestos en libertad bajo fianza con condiciones que incluían la prohibición de entrar en cualquier embajada extranjera o departamento gubernamental, mientras que a algunos se les impuso la condición adicional de no entrar en el área de Dublín 4.
Tras haber sido liberado, un miembro de “Anti-Imperialist Action Ireland” declaró: «Hoy, republicanos y antiimperialistas hemos adoptado una postura valiente y honorable para resistirnos a la presencia de la OTAN en Irlanda y denunciar su papel en la ocupación de nuestro país y de Palestina. Esta protesta pacífica fue recibida con violentos ataques por parte de la policía del Estado Libre, que causó heridos graves, en un intento de intimidarnos e impedir nuestras acciones futuras. Estas tácticas no funcionarán con nosotros y nos mantendremos firmes.”
La AIA elogió el nivel de disciplina mostrado por los detenidos y todos los participantes en la protesta frente a la provocación y la violencia. «La OTAN no tiene cabida en Irlanda, ya que desempeña un papel clave en la ocupación británica de Irlanda, la ocupación estadounidense del aeropuerto de Shannon y la ocupación y el genocidio sionistas en Palestina. Los republicanos y el pueblo irlandés tienen todo el derecho a resistir la presencia de la OTAN en su tierra y nos comprometemos a seguir desarrollando la campaña y a organizar nuevas acciones directas contra ella.»
